Te amo, te odio, dame más

Sentenciaba Serú Girán en el estribillo de Peperina. Y era un culto a la indecisión, la máxima expresión del conformismo disconforme, el más grande homenaje a una relación que se mantiene entre amores, odios, disgustos y placeres.

Este tipo de relaciones son consideradas en psicología como enfermizas. Son formas de comparecerse con un entramado muy complejo. Seamos honestos en algo, todos alguna vez tuvimos alguna; si es que no la tenemos ahora; y seguramente tendremos otras en el futuro. Parecen ser indispensables para la vida humana.

Muchas veces las autoridades gubernamentales son vistas como eso, titulares de ejes de poder y nos olvidamos que son seres humanos que cumplen roles. Sí, son personas. Por esto, tal vez, es que muchas veces los gobiernos (formados por personas de carne y hueso que representan a otras personas de carne y hueso) tienen actitudes que se acercan muchísimo a las acciones típicas de las personas en la vida cotidiana.

Una de las noticias más importantes del día es que el Presidente de Venezuela, Hugo Chávez decidió nacionalizar SIDOR, una empresa del Grupo Techint. No es objeto de esta entrada explicar la historia del grupo empresario ni tampoco desarrollar la noticia. Para esto les recomiendo el artículo que el diario Crítica publicó en el día de la fecha al respecto: http://criticadigital.com/impresa/index.php?secc=nota&nid=2518

¿Cuáles son los problemas que se presentan? Los problemas son varios y casi todos ellos afectan a los kirchner que como si fuera poco e inmersos en varias problemáticas (paro del campo, los nuevos números de Marzo del INDEC, la polémica por los medios, etc) tiene que afrontar una mediación en donde hay que agradar a todo el mundo.

Para explicarlo de una manera simple y concreta podemos expresarlo así. Imaginemos un chico joven de aproximadamente 20 años que está de novio con una chica de similar edad. La presenta en la casa de sus padres y la reacción de la madre es inmediata. Caras de disgusto, malas formas y desatenciones que hacen notar que la chica no es del agrado de su mamá. ¡Vaya problema! Termina la reunión y nuestro joven protagonista se retira con su novia a “un lugar más tranquilo”. Allí aparecen los reproches. “Tu mamá me odia”, “es evidente que no le caí para nada bien”, “yo a tu casa no voy más”, “no te enojes mi amor pero la verdad es que no me gusta sentirme así”.

Nuestro joven vuelve a la casa paterna a la mañana siguiente y la madre lo confronta: “Esa chica no es para vos, te va a hacer mal, no me gusta”. Efectivamente, la historia quizá le diera la razón a la madre, varias veces habíamos visto al joven protagonista llorando acodado al borde de la cama por la desidia causada por la chica. Pero la quiere, intensamente, y debe lograr que las dos mujeres más importantes de su vida no se peleen.

Algo así pasa hoy por hoy entre el gobierno, Techint y Chávez. Los kirchner necesitan de Chávez y su gran poder en la región que, no solamente los financia económicamente a través de la compra de bonos o de la provisión de combustible líquido para suplir la falta de gas en nuestro país, sino que además su amistad le permite, en términos políticos, tener otra fuerza de negociación frente a los demás países. Sin ir más lejos, entre las peticiones del Presidente de Francia, Nicolás Sarkosy a la presidenta de la nación estuvo la solicitud de intentar controlar a aquel, que en términos de Marx vendría a hacer el fantasma que sobrevuela Sudamérica.

Por otro lado, aunque cada vez menos argentina, Techint es una de las empresas más importantes del país y tiene muchísima fuerza y poder político con lo cual pidió que el gobierno interceda ante la posibilidad de perder más de U$S 2.400 millones por año.

Lo que le toca a nuestra presidenta hoy por hoy es justamente mediar entre estas cosas. Quizá sea una buena idea tomarse un té de peperina y decirle a nuestro querido amigo Huguito, “te quiero, te odio, dame más”.

NOTA: La utilización de la canción Peperina de Serú Girán para explicar esta nota no es arbitraria. Es completamente intencional. De hecho, los invito a que juntos escuchemos el tema y leamos la letra donde Charly García con su prosa tan característica retrata a una mujer un tanto particular. CUALQUIER SIMILITUD CON LA REALIDAD ES PURA COINCIDENCIA.

Peperina

Serú Girán.

Quiero contarles una buena historia
la de una chica que vivió la euforia
de ser parte del rock
tomando té de peperina.
Típicamente mente pueblerina
no tenía huevos para la oficina
subterráneo lugar de rutinaria ideología.
Romántica entonaba los poemas más brillantes
susurrándo al oído de mil representantes:
te amo, te odio, dame más.
Mirando al campo se olvidó del hombre
mirando al rico se vistió de pobre
para poder saber lo que chusmeaban las vecinas.
En su cabeza lleva una bandera
ella no quiere ser como cualquiera
ella adora mostrar la paja de la cara ajena
Y dentro de su cuento ella era cenicienta,
su príncipe era un hippie de los años sesenta
te amo, te odio, dame más.
Trabaja en los recitales,
vive escribiendo postales
duerme con los visitantes
y juega con los locales
su cuerpo tiene pegada grasa de las capitales.
Te amo, te odio, dame más
Te amo, te odio, dame más.
Te amo, te odio, dame más.

Comentarios

Anónimo ha dicho que…
Noooooooooo! Esto es de otra galaxia
Te juro por dios que yo también asocié esa canción con la señora Presidente.
Me gustó lo que escribiste. Salu2!
Enrique Pareta ha dicho que…
Esas casualidades son buenísimas! Me encanta que te haya gustado la asociación. Gracias por la visita y seguí comentando y participando que así construímos ciudadanía. Saludos!

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