¡Viva la televisión!

Ustedes desde estas páginas fueron testigos de mis impericias a la hora de encontrar trabajo relacionado con el periodismo. Ese sueño casi utópico de querer vivir y trabajar de lo que a uno le gusta, donde a uno le gusta vivir, en un país donde abunda el hambre, la pobreza, las epidemias de principios del siglo pasado pero no el trabajo.
Parece que, una vez más, las cosas salieron bien. He conseguido trabajo en los medios. Es irrisorio pero para un ferviente apasionado por la radio como yo resulta hasta irónico que sus trabajos más importantes hayan sido en televisión. Más allá de poder comer de lo que uno hace no hay que dejar de reflexionar sobre su entorno por eso, ahora que vuelvo a trabajar en televisión, más que nunca debo meditar sobre ella. Haciéndolo encontré un texto que realmente resume mucho de lo que se ve como consecuencia de apretar el botoncito que dice "on" en nuestro control remoto. Leamos juntos a Leo Masliah en su texto "Canal de Nada" del libro Cuentos Impensados

Canal de nada


Hay un canal nuevo en la televisión. Es un canal de nada. Transmite durante las veinticuatro horas y tiene una programación dinámica y muy variada, aunque todos sus espacios tienen en común el ser espacios de nada. Pero la gente que va fijando las pautas generales que rigen la programación y los directores de cada programa específico tienen una capacitación sin la que no podrían llevar adelante su labor, ya que no todas las clases de nada (la nada es una sola, pero son incontables las formas de mostrarla) son aptas para captar la atención de las enormes masas de televidentes o el interés de las grandes empresas que patrocinan los programas (algunas son empresas de nada, pero otras son de muchas cosas, no se vayan a creer que no). Hay qué saber cómo hacer nada, y sobre todo, dando la impresión de que se está haciendo algo, teniendo siempre cuidado de que esta impresión no cruce la delgada línea que la separa de una percepción, o sea, que realmente se esté pasando de no hacer nada a hacer algo. Es todo un arte este tipo de natación, natación de nadar pero de nadar no en el sentido de nado sino de nada; es todo un arte la nada sincronizada. Hay que cuidar que, aunque se trate de hacer nada, el hincapié de los programas se tiene que dar no en el hacer, sino en nada. Pero sin mostrar que se está haciendo hincapié en eso, y tratando de aparentar todo el tiempo que hay mucho trajín, mucha actividad, que estamos con esto o con lo otro, que vamos a estudios o al móvil o a Fulana que está allá o a este otro que está frenético por pasarnos el informe de todo el glamour que se está desplegando sobre nada. Pero en estas ostentaciones de no hacer nada a veces se producen fallas y no hay nada que hacerle. Por ejemplo, hubo un programa donde iban siguiendo a una famosa modelo por distintos lugares donde ella no hacía nada; iban con ella a Cancún, después a Roma, después a las islas Fidji, y en cada lugar iban mostrándola a ella sin hacer nada y también había largas secuencias donde pasaban tomas de los viajes de un lugar a otro, mostrando cómo durante cada viaje esta modelo se pasaba también todo el tiempo sin hacer nada. Pero lo que pasó con ese programa fue que por momentos los realizadores explicaban o daban a entender demasiado claramente las distintas etapas del registro que iban llevando a cabo; entonces, aunque ese registro era un registro de nada, el hacerlo sí era algo, y al haber tomado durante algunos instantes ese algo como tema o como foco de atención del programa, sus realizadores entraron en una flagrante violación de las directrices que se les habían fijado y fueron despedidos. Ahora están tratando de hacer algo para subsistir, pero nada.

Comentarios

12 Docentes ha dicho que…
Estimado alumno, en C-12 le contesté su aviso. Se lo repito textual aquí por las dudas. Y muy bueno lo de Masliah.

"Una lástima la deserción de Pareta. Lo recuerdo bien, desde la perspectiva de los alumnos en clase se ubica en posición de número nueve, adelante y al centro. Es de pedir la pelota. Aveces se la devolví redonda y otras lo tuve que salir a cruzar con las dos piernas, como buen ex número 5 que soy. En fin. Yo no le voy a complicar la vida si usted privilegia la Libertadores, los miércoles. El tema es que si no juega los lunes, se le va a poner fulera la cosa en instancias finales porque ahí se juegan fechas difíciles como Maquiavelo. Al menos mande gente de su confianza que lo tenga al tanto, que le diga cómo jugó el rival. Eso sí."

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