NO ES JUSTO - reclamo por la restitución de nuestros artistas

Por Iván Steinhardt

Esteee... Señor... mmm Dios. O quién sea:

Tenemos una impronta especial los argentinos para ir perdiendo los espejos que nos reflejan. Esos que con el humor nos muestran lo que somos. Por eso me dispensará de toda ofensa, si es que la causo, señor Buda, Alá, Dios, Yavé o quien sea que con tantas coincidencias en la pureza del alma pareciera uno de los tantos clowns que expresan el mismo chiste en distintos idiomas.

Pues verá noble señor y con todo el respeto que me merece, la gente de Argentina es un poco mas difícil si me permite y por eso, hemos parido tanta gente de la que seguimos necesitando a pesar de sus requerimientos para que estén a su lado. Con tanto malandra dendo vueltas por estas tierras, no puede ser que cada vez que UD se siente aburrido se lleve a alguien para que entretenga su acicalada mente.

Por ello es que me permito en calidad de mortal y sin estar de acuerdo; ni con la filosofía griega ni con la jurisprudencia romana, demandar el derecho a entenderme a mí mismo como argentino antes de partir para sus lares aún sin saberme merecedor de aquella morada.

Jugándome el todo por el todo le voy a hacer el siguiente reclamo:

No es muy considerado de su parte que estando como estamos desde hace muchas décadas Ud nos prive de aquellos artistas que hasta hace relativamente poco echaban un poco de luz sobre tanta oscuridad.

Me veo en la inevitable situación de exigirle que nos devuelva inmediatamente al “Negro” Olmedo. Hombre que supo dibujar en vivo la picardía, la culpa y la complicidad entre amigos hasta hacer una caricatura de carne y hueso de la pedantería argentina y en el mismo contexto revelarnos como gauchos entre nos, sin miramientos de los orígenes.
No es justo que haya UD acaparado la explicación semanal de la máquina de cortar boludos de Tato. Nosotros no hemos sabido estar sin esos monólogos de los domingos que nos daban la excusa de charla entre canillitas y barrenderos los lunes por la mañana. Supongo que recordará la cantidad de políticos que sudaba la gota gorda entre las 9 de la noche del domingo y las 7 de la mañana del lunes gracias a esos textos maravillosos.
Tampoco es justa la falta de bandoneón de Piazzola para graficarnos la evolución de nuestra música.
Protesto por la falta de Pepe Curdele, Pepe Galleta y Pepe Estropajo. 3 tipos que se parecen mucho a Pepe Biondi y que también resumían nuestra sociedad con esos guiños y que seguramente habrán conocido a Minguito Tinguitella, personaje que UD también se llevó sin previo aviso.
Me niego a pensar mi Argentina sin esos dos irreverentes que disimuladamente UD se guardó en un bolsillo por separado. Como trazando un paralelo entre la pérdida del poder adquisitivo y la del derecho a hablar. Claro, como eso se va perdiendo de a poco UD cree que no nos dimos cuenta pero sí. Primero Adolfo Castello y luego Jorge Guinzburg.
¿Realmente pensó que no nos íbamos a dar cuenta?
Desde ya pido la reincorporación inmediata de los dos cronistas de mi país. El Polaco de la General Paz para el Río de la Plata y al Atahualpa de la General Paz para afuera. Y que conste que nadie de los que estamos acá reclamando pidió semejante división tan pacata y retrógrada como los que la construyeron.
Y ya que hablo de la Argentina globalizada, le pido encaricadamente la devolución del “Negro” Fontanarrosa con todos sus atributos físicos e intelecutales para que pueda seguir mostrándome la ultraderecha de Boogie y el anarquismo utópico de Inodoro. Esta restitución incluye a Mendieta y la Eulogia sin los cuales no habría barrio ni conventillo.
Como ve no me olvidé de la gráfica, así que por favor devuelvanos a Andrés Cascioli.
Por cierto que necesitamos de la maravillosa, ingeniosa y superaltiva impronta de Sandrini y ni que hablar de la desfachatez de  Niní Marshall.
Quiero la sencillez rockera de Pappo, la exorcización de las drogas de Luca Prodan y la libertad de expresión sexual de Miguel Abuelo, Federico Moura y por supuesto ese puto maravilloso de Fernando Peña.
Quienes quiera que estén allá arriba:
en Argentina necesitamnos de todos ellos y de todos los artistas que ahora les hacen compañía. Los necesitamos como nunca acá abajo.
Yo entiendo que allá en la nubes estén aburridísimos, pero basta. A mí no me engañan porque se que ya tienen a Chaplin; a Lennon y a varios etcéteras.

Entiendo que los argentinos somos mas difíciles de entender y por eso quizás Ustedes se estén llevando a mas artistas que nunca. Pero sepan esto: Nuestra supervivencia depende de aquellos que con humor nos chantan un espejo en la jeta y nos hacen reír de nuestras propias falencias. Porque con la insistencia de nuestros artistas un día vamos a dejar libre ese ser que temos dentro que desborda generosidad, solidaridad y amor propio.
Les pido por favor que nos devuelvan a nuestros artistas, que bajen juntos desde el cielo y armen todos la gran revista nacional en el Obelisco un espectáculo que se llame “Jodete por no hacerme caso”. Una única función que quede guardada para todos los tiempos en la memoria de los argentinos y que quede tan marcada a fuego que generación tras generación se venere a los artistas con tanta vehemencia que la política no tenga otra opción que tabajar para mantener a un pueblo feliz de ser como es, pero sobre todo digno se sí mismo.
Eso es lo que le exijo desde este lugarcito. Y si no fuera posible... al menos no se lleve a ningún artista mas.
Gracias anticipadas,
El Inspector de Tímpanos.